miércoles, octubre 12, 2011

La propia sangre

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Vinieron.

Ellos tenían la Biblia

y nosotros teníamos la tierra.

Y nos dijeron:
“Cierren los ojos y recen”.

Y cuando abrimos los ojos,

ellos tenían la tierra
y
nosotros

teníamos la Biblia.








Eduardo Galeano






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